Paraguay 2431, Montevideo.
Del 8 de octubre al 13 de noviembre.
De lunes a viernes de 9 a 17 hs.
El presente trabajo surge en el marco del “Taller de Elaboración de un Proyecto”, realizado en el Instituto Escuela Nacional de Bellas Artes - UDELAR, como parte de los Cursos de Educación Permanente año 2008, para egresados universitarios. Como resultado de dicho taller, los participantes juntos a los docentes Solange Pastorino, José Pilone y el coordinador por IENBA, Roberto Villares, se plantean llevar a la práctica la metodología aprendida.
El Proyecto “Ver – Nos” pretende hacer visibles ciertos actos cotidianos que casi inconscientemente se han internalizado en la sociedad. Se toma como punto de partida dos hábitos que los ciudadanos realizamos en público: comer y hablar por teléfonos celulares. Estas temáticas son referencia de ese corrimiento de límites entre lo íntimo y lo público. En la actualidad la vertiginosidad y el ritmo acelerado se constituyen en una constante. Según García Canclini somos participes de una “socialidad” construida fundamentalmente en procesos de consumo, y este se vuelve “el principal procedimiento de identificación”.
Dada la temática abordada, se procura introducir al espectador en lugares cotidianos reducidos para el encuentro de imágenes.
Se define la exposición de las fotografías en ascensores de edificios de oficinas, de gran circulación de personas. En este ámbito se presenta un panorama, donde resulta muy difícil determinar los límites entre lo íntimo y lo público.
La esfera pública trasciende el interés y la acción particular de cada individuo, sin embargo en el entramado social y en determinados escenarios la actividad individual íntima parece posicionarse cada vez más sobre el ámbito de lo público y a la inversa.
Estos actos caracterizan la hipermodernidad, lo que Z. Bauman llama Modernidad líquida. La globalización de la economía neoliberal, trasunta geografía, culturas, religiones, afecta no sólo las políticas de los países, sino que penetra como líquido en la subjetividad, en la libido de las personas no sólo en sus ámbitos laborales sino en su cotidianeidad. Inevitablemente en nuestra rutina cotidiana terminamos asistiendo de una manera u otra a este juego que se presenta como el gran espectáculo global.
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